Sarkozy nos da la lata con el “déficit” de los regímenes (como el de la Seguridad Socialen su conjunto) al acusar lo privilegiados que serían los trabajadores de la SNCF, RAPT, EDF, etc. Ahora bien, ... el gobierno se cuida muy mucho de señalar con el dedo al conjunto de regímenes especiales, como los de los diputados o de los militares.

Detrás del cuestionamiento de los llamados regímenes especiales se perfila una elección de sociedad. Se nos da la lata con el “déficit” de los regímenes (como el de la Seguridad Socialen su conjunto) al acusar lo privilegiados que serían los trabajadores de la SNCF, RAPT, EDF, etc. Ahora bien, durante sus numerosas apariciones mediáticas, el gobierno se cuida muymucho de señalar con el dedo al conjunto de regímenes especiales, como los de los diputados o de los militares. Sin embargo en el ejercito, 500.000 militares, se reparten un fondo de 8.200millonesde euros contra 5.000 millonesde para 1,1 millones de pensionistas de la SNCF. Un militar puede además tomar su retiro al cabo de 15 años de servicio contra los 37,5 de un ferroviario.

Si estos regímenes son “más favorables”, es debido a unas cotizaciones más importantes así como a que se ha tenido en cuenta la penosidad y la continuidad del servicio público (trabajo nocturno, turnos horarios, disponibilidad, movilidad etc.). También ha pasado silenciosamente el hecho de que estos regímenes especiales, como el régimen general, participan en la financiación de las jubilaciones de los no-asalariados (agricultores, comerciante y artesanos) con muchos miles de millones de euros cada año (6.000 en 2006). Además, el “déficit” de los regímenes especiales se debe al déficit demográfico que resulta de la baja de efectivos ( especialmente al favorecer el “todo por carretera” frente al transporte ferroviario) y por lo tanto de las cotizaciones. Los verdaderos privilegiados son de hecho los patronos, exonerados de cotizaciones (25.000 millones por año de los cuales 10.000 millones son para las jubilaciones), incluidas sobre sus stockoptions (3.000 millones por año) sin contar con los blindajes y los retiros “dorados”.

Para remediar el “déficit” de las jubilaciones, se nos propone primero alinear los regímenes especiales conlos de la función pública, luego aumentar las anualidades de cotización del conjunto de los asalariados a 41 años en 2012 (ley Fillon 2003) incluso más en los años siguientes. Así pues el aumento de las anualidades plantea muchos problemas. Si las jubilaciones son retrasadas, el paro corre el riesgo de aumentar, especialmente entre los jóvenes y los mayores de 45 (seniors), muy afectados ya a problemas de contratación. Más aun cuando el crecimiento de la precariedad y del paro, vuelve imposible alcanzar las 41 anualidades, lo que aumentará las desigualdades entre los, “ricos”, capaces de suscribir un plan de jubilación complementario (fondo de pensiones) y los, “pobres”, que deberáncontentarse con jubilaciones cercenadas. Más ampliamente, estos ataques esconden apuestas ideológicas. La calidad de vida y el espacio del “progreso”. ¿debemos vivir más para trabajar o para aprovechar la vida? El agujero de la Seguridad Social es un problema de distribución de las riquezas, que no cesan de aumentar.¿Se debe repartir éstas de forma solidaria (por cotizaciones salariales) o promover el individualismo (fondo de pensiones)? El paro y la precariedad son responsabilidad de los patronos, es a ellos a los que corresponde pagar.

Todas estas maniobras expresan el rumbo que quiere tomar el gobierno: el de la destrucción pura y dura de la solidaridad, de lo que queda de los servicios públicos de la salud, de la educación y de los transportes. Pretende pisotear los principios fundadores de la protección social: unidad y universalidad. Mañana no quedará ya nada si renunciamos a combatir hoy.

Es por lo que la CNT desea un homogeneización y una armonización a alza de los regímenes con el fin de acabar con la multitud excesiva, corporativista y anti-igualitarias de los estatutos.

Nuestra reivindicaciones:

ØJubilación a los 55 años para todos y todas con el cien por cien de la base de cotización

ØTener en cuenta la penosidad del trabajo (tomando como criterio la esperanza de vida de cada categoría profesional

ØTener en cuenta los años de estudio y los periodos de paro

ØRechazo de la jubilación por capitalización (ahorros salariales y fondos de pensiones) o de su financiación por impuestos

ØReducción masiva del tiempo de trabajo, sin perdida de salario ni empleo, para todos y todas.

ØAumento de los salarios y especialmente de los salarios más bajos (por lo tanto aumento de las cotizaciones). El mejor medio de repartir las riquezas producidas, señaladas por el PIB, es el de devolverlas a los y las que las han producido, es decir a los asalariados, por medio de los salarios y de las cotizaciones.

ØPor una jubilación con el 100% de reposicióncalculada sobre los salarios (como mínimo el Salario mínimo interprofesional “Smic”) revalorizados al alza de la escala salarial.

ØExclusión de la patronal ( Medef y Cía.) de las instancias de gestión de las cajas de solidaridad de los trabajadores (Seguridad social, jubilaciones, paro)y la gestión de estas cajas por los propios trabajadores.

ØSupresión de la exoneración de cotizaciones

ØFinanciación por una revalorización de las cotizaciones patronales, congeladas desde hace veinte años

ØExtensión de la base de cotización a todos los componentes de la remuneración (intereses, participación en los beneficios, stock-options)

Anticapitalista y autogestionaria, la CNT lucha por una redistribución de las riquezas en provecho de los trabajadores y en detrimento del capital.